LINEAS DE INVESTIGACIÓN

 

 

 

En el año 2014, se digitalizaron cerca de 40.000 documentos relacionados a la actividad de fumigación aérea en cultivos de banano a nivel nacional. La información obtenida fue analizada y validada por un grupo de técnicos especialistas del área; creándose la base de datos inicial como herramienta principal para la construcción de indicadores y estadísticas que permiten identificar la presión que ejerce esta actividad en el ambiente.

Plantación de Oritos

El SIESAP agrícola y pecuario (cultivo de banano) trabaja con información de la Dirección General de Aviación Civil (DGAC) a través del Sistema de Información de Fumigación Aérea (SIFA). El SIFA es una herramienta tecnológica disponible en la web que permite el registro y actualización de datos sobre la fumigación aérea autorizada por la entidad de control y la generación de indicadores y estadísticas socioambientales.

En el año 2017, se realizó acercamientos estratégicos a varias entidades públicas relacionadas con la actividad, como Agrocalidad, Unidad de Banano del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), Centro de Información y Asesoramiento Toxicológico del Ministerio de Salud Pública (CIATOX -MSP), entre otros.

Reunión con Agrocalidad

El SIESAP agrícola y pecuario (cultivo de banano), busca identificar la presión que ejerce esta actividad en el ambiente a partir del análisis de la fumigación y los insumos utilizados en la producción agrícola, específicamente en el cultivo de banano a nivel nacional.

Oritos previo su empaque

Producción bananera

El Ecuador desde sus épocas precolombinas hasta la actualidad ha basado su economía principalmente en la extracción de recursos naturales, destacando la producción agrícola como una de las fuentes de riqueza y desarrollo económico que ha posicionado al país internacionalmente en los primeros lugares en la producción de banano, cacao y desde hace algunos años, también de flores.

Planta de Banano

El crecimiento de la población demanda mayores cantidades de alimento en menor tiempo, debido a ello los productores agrícolas utilizan técnicas no tradicionales que paulatinamente van generando problemas ambientales y sociales relacionados al uso intensivo de productos agroquímicos en grandes extensiones de terreno, que son utilizados para controlar plagas, maximizar el rendimiento de las cosechas y mejorar la calidad del suelo.

A continuación se presentan las afectaciones ambientales provocadas por la implantación y ejecución de actividades agropecuarias desarrolladas desde finales del siglo XIX y XX en el territorio nacional, tales como fumigaciones aéreas, monocultivos, entre otras.

  • Pérdida de la cobertura vegetal: debido a la conversión del bosque a la agricultura. Los ecosistemas más utilizados son el bosque húmedo de la Costa (75%), el bosque húmedo montano occidental y el bosque seco occidental (70%) (SENPLADES, 2013).
  • Pérdida de fertilidad del suelo: la capacidad que tienen los suelos para proporcionar nutrientes a los cultivos se ve afectada por una serie de incidentes como: erosión, el disponer de sistemas de cultivos no adecuados a la capacidad agronómica de cada suelo, la compactación provocada por el uso de maquinaria pesada, el uso de fertilizantes y plaguicidas.
  • Contaminación del suelo: se genera por la alteración o modificación de su composición natural, provocando la degradación de la calidad ambiental.
  • Alteraciones al recurso hídrico: los principales impactos que generan las actividades agrícolas sobre los recursos hídricos se relacionan con la toxicidad y persistencia de los productos químicos utilizados, que por medio de infiltración o escorrentía alcanzan los cuerpos de agua cercanos.

Impactos potenciales a la salud humana

  • Según investigaciones realizadas, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha identificado que cada año, tres millones de personas sufren envenenamiento por plaguicidas, la mayoría de estos casos, se concentran en países en vías de desarrollo.
  • En Ecuador, el Centro de Información y Asesoramiento Toxicológico (CIATOX) del Ministerio de Salud Pública (MSP), registró 11.398 casos de intoxicaciones durante el periodo 2015 - 2017, de los cuales 5.283 casos (46,35%) corresponden a intoxicaciones por plaguicidas de uso doméstico y agrícola. Las intoxicaciones de tipo ocupacional corresponden a 616 casos y 11 casos se relacionan a intoxicaciones por fertilizantes. Las rutas de intoxicación más frecuentes son por vía inhalatoria y cutánea.

Fuente: Revista El Agro